Una de las características más reconocibles del escultor valenciano Andreu Alfaro (1929 - 2012) son sus grandes esculturas formadas por estructuras de hierro, muchas de ellas formadas por líneas, rectas o curvas, que se mueven en el espacio sufriendo transformaciones geométricas.[br][br]Un grupo de ellas lo forman sus superficies regladas en los que una línea gira a la vez que se traslada en el espacio. Reproducir con geometría dinámica sus obras no siempre es trivial pues sus líneas, en esas transformaciones, no mantienen fija su longitud, sino que aumentan o disminuyen para obtener un resultado visual artístico.[br][br]Un ejemplo lo tenemos en la escultura titulada "Dos rombos" expuesta en el parque Cervantes de la ciudad de Barcelona.