La geometría puede ser aplicada de varias formas para mejorar la alineación en el ballet.[br][br]1. Conciencia espacial: La geometría puede ayudar a los bailarines a desarrollar una mayor conciencia espacial, lo que les permite entender y controlar mejor su posición en el espacio. Esto implica comprender los ángulos, las líneas y las formas que forman sus movimientos y posiciones corporales.[br][br]2. Posicionamiento de las extremidades: La geometría puede ser utilizada para enseñar a los bailarines cómo posicionar correctamente sus extremidades, como brazos y piernas, en relación con su cuerpo y el espacio circundante. Esto implica comprender los ángulos y las trayectorias que deben seguir para lograr una alineación adecuada.[br][br]3. Alineación de la columna vertebral: La geometría puede ayudar a los bailarines a entender la importancia de mantener una columna vertebral alineada durante los movimientos. Esto implica comprender las curvas naturales de la columna y cómo mantener una alineación vertical adecuada.[br][br]4. Utilización de puntos de referencia: La geometría puede ser utilizada para enseñar a los bailarines a utilizar puntos de referencia visuales o imaginarios para mantener una alineación adecuada. Esto implica identificar puntos clave en el cuerpo, como la cabeza, los hombros, la pelvis y los pies, y utilizarlos como guías para mantener una postura correcta.[br][br]5. Corrección de desalineaciones: La geometría puede ser utilizada para identificar y corregir desalineaciones en el cuerpo de los bailarines. Esto implica utilizar principios geométricos para identificar asimetrías o desequilibrios en la postura y trabajar en ejercicios específicos para corregirlos.[br][br]La aplicación de la geometría en el ballet requiere la guía y supervisión de un instructor calificado en danza, quien podrá proporcionar ejercicios y correcciones específicas para cada bailarín.