Desde tiempos antiguos, las ecuaciones han sido herramientas en manos de matemáticos. En el XVII a.C., tanto los matemáticos de Mesopotamia como los de Babilonia ya dominaban la resolución de ecuaciones. En el siglo XVI a.C., los matemáticos egipcios llevaron a cabo un álgebra básica para resolver problemas cotidianos relacionados con la distribución de alimentos, cosechas y materiales.[br]Utilizaban un método de resolución conocido como el "método de la falsa posición". Aunque no contaban con notación algebraica, empleaban la palabra "aha" (que significa montón o pila) para representar la incógnita. Esto pone de manifiesto que, incluso sin la notación formal, ya estaban trabajando con lo que posteriormente conocemos como ecuaciones de primer grado.